Paradas y marquesinas.

Paradas de la línea 92 y la Catalana en el año 1980
Paradas de la línea 92 y la Catalana en el año 1980

Postecillo de parada en Pedralbes, año 1967
Postecillo de parada en Pedralbes, año 1967

Postecillo de parada final de la línea 41 en la Pl. Calvo Sotelo, años 60
Postecillo de parada final de la línea 41 en la Pl. Calvo Sotelo, años 60

Parada de tranvia de los años 60
Parada de tranvia de los años 60

Parada de tranvía en la Pl. España
Parada de tranvía en la Pl. España

Parada del autobus 16 y 17 al inicio de la Via Agusta, año 2000
Parada del autobus 16 y 17 al inicio de la Via Agusta, año 2000

Parada en la Plaza España
Parada en la Plaza España, año 2000

Parada digital
Proyecto de prubeas con un parada que indicaba la frecuencia de los autobuses, a finales de los 90

Parada de la línea 7 enfrente del Centro Comercial Glorias
Parada de la línea 7 enfrente del Centro Comercial Glorias (2000)

Parada en la Vía Agusta, año 2001
Parada en la Vía Agusta, año 2001 (121 Kb)

Marquesina, año 2001
Marquesina en la calle Mayor de Gracia cerca de la Pl. Lesseps, año 2001

Marquesina en la Pl. España, año 2001
Marquesina en la Pl. España, año 2001

Marquesina, año 2001
Marquesina, año 2001

Marquesina en la Pl. España, año 2001
Marquesina en la Pl. España, año 2001

Parada, año 2001
Parada, año 2001

Al principio los tranvías no tenían paradas fijas, es decir, se paraban siempre que un pasajero pedía bajar o cuando un viandante hacía un gesto para subir. Hasta 1910 no se reglamentó las paradas fijas, classificadas en obligatorias y discrecionales, que se señalizaron pintando en un palo de la línea aerea unas franjas con la bandera española.

Respecto a los autobuses, la CGA (Compañía General de Autobuses), la primera empresa de autobuses de Barcelona, señalizaban sus paradas con unos recuadros de baldosas de color rojo, con el escudo de la Compañía y la palabra "parada", que se colocaban en las aceras de las calles por las que pasaban los autobuses. En las paradas de mayor afluencia se fijaban unos postes que sostenían en la parte superior el rótulo de la parada y se fijaba al poste un cajetín con un taco de billetes que sólo contenían la letra de la línea y números, destinados a quienes aguardaban turno para subir a los coches, turno que se respetaba estrictamente en razón de la capacidad limitada de los vehículos que sólo podían llevar viajeros sentados. Acostumbrados como se estaba en la época a ver a los viajeros como asaltaban los tranvías por puertas y ventanas, esta actitud del público ante el sistema empleado por los autobuses no dejó de llamar la atención.

Las paradas siguieron colocandose, pero cada vez más se volvieron en invisibles paradas, porque los pequeños carteles indicadores apenas eran visibles entre el frondoso arbolado de nuestras calles. Estaban prendidos en ocasiones de un farol o de un posté de la compañía, y ocasionaban laboriosas e intrincadas búsquedas, pues debía considerarse que no todo ei mundo utiliza a diario una misma parada.

Pero se arregló en febrero del año 1960, cuando se empezaron a sustituir los tradicionales indicadores de parada de los autobuses por unos llamativos postecillos pintados con franjas negras y amarillas y en cuya parte superior estaban montadas dos placas metálicas de 37 x 51 cms. a las que se fijaban unas tiras serigrafiadas en las que se especificaba el indicativo de la línea, el detalle de su recorrido y la hora de la primera y última salida del servicio, que permitía a los usuarios conocer perfectamente si a la determinada hora los autobuses que circulaban estaban o no en servicio.

Además también en esta época se empezó a señalizar las paradas con prohibición del estacionamiento, lo que permitió dar mayor regularidad a los usuarios en las operaciones de subida y bajada a los vehículos.

La prensa se hizo inmediato eco de lo acertado de esta medida que, seguidamente fue extendida a las líneas de trolebuses y, posteriormente, a las de tranvias. Para autobuses y trolebuses, las aletas eran de color amarillo y las indicaciones de color negro sobre fondo amarillo; para tranvias, las aletas eran blancas, y las indicaciones de color rojo sobre fondo blanco.

A esta parada se le denominó de tipo "TB" (Transportes de Barcelona) y convivió durante mucho tiempo con la siguiente explicada ("Vidal Hospital"). Este tipo de parada se utilizaba para sitios reducidos y la siguiente para sitios donde se podría poner la parada con publicidad, ya que ocupaba más espacio. Tambien al final, al suprimirse los tranvías, las aletas pasaron a ser siempre amarillas.

Cabe destacar que las paradas de tranvias: las aletas eran de color blanco y la de paradas anuladas: de color rojo.

Como hemos comentado, posteriormente apareció el palo de parada con publicidad que tanto recordamos y veiamos en los años 70 y 80. Tenía la denominación de "Vidal Hospital". Su nombre viene de un contrato-subasta que fue convocado por la empresa Tranvias de Barcelona en el año 1959 para explotar un nuevo servicio de publicidad en las placas indicadores de las paradas. Este contracto fue otorgado a Don Miguel Vidal Hospital que realizo su diseño.

La primera parada Vidal Hopital se puso en la Pl. Trilla el 29 de diciembre de 1970. Después de unas obras de canalización de la Compañia de Aguas, se sustituyó la antigua por esta "moderna". Además el lugar también tiene su "encanto", porque la Pl. Trilla era el final de la primera línea de bus de Barcelona. Por aquel tiempo en esa parada pasaban las líneas 22-23Ext-24-25-26-27-31-NA y ND

El palo de la parada era de color negro, execpto la zona donde se indicaba la zona informativa (de 545 mm) que era de franjas de color negro y amarillo (cada franja medía 60 mm). La indicación de las líneas que se paraban en la parada era un plafon longitudinal de color blanco de 80 mm de altura, donde se enganchaban números y letras negras indicando las líneas de la parada. La fuente de las letras o número era Helvética Bold. Si además la parada era el final o el origen de la línea tambien se indicaba en este plafón. La zona informativa donde se engachaban los adhesivos de las líneas eran una plancha de hierro de color amarillo en la que aparecía en la parte superior la frase "PARADA BUS" serigrafiado. Por último existía el plafón publicitario de 800 x 1100 mm en la parte superior de la parada, donde se colocaba la publicidad en papel sobre planchas de metal.

En los primeros tiempos de esta parada, tenian una máquina, pintadas de amarilla, de chicle de 1 peseta. Más adelante desapareció la máquina de chicle pero siguió quedando la forma donde se instalaba, posiblemente por equilibrio de la parada.

Existía un número de referencia del palo de la parada que se situaba en el caso de las paradas "Vidal Hospital" entre el plafón de publicidad y el plafón longitudinal que se utilizaba para indicar las líneas de las paradas y en la parada tipo "TB" sobre el elemento de fijación de los paflones de información. En ambos casos las letras eran de moldes de color amarillo sobre fondo negro.

En algunas paradas donde existía un gran número de coches que paraban, por ejemplo en la Av. Principe de Asturias con la Pl. Lesseps, se colocaba una segunda parada con la indicacion "Segundo Coche" que servia para recoger pasaje de un autobus que llegaba en segundo lugar cuando existía otro ya parado. El palo de parada de segundo coche no incluía ninguna información sobre las líneas solo la referencia, en letras de molde, "Segundo Coche"por un lado y "Segon Cotxe" (en catalán) por otro.

Tal como hemos citado, las tiras adhesivas de las líneas se colocaban en los plafones de hierro de información. En un principio las etiquetas informativas de las líneas tenían el color de fondo totalmente blanco si se trataba de un tranvía y amarillo si se trataba de un autobús, en ambos casos las letras eran de color negro. Más adelante la empresa adoptó un código de colores para clasificar las líneas que afectaron a las etiquetas de las líneas. La indentificación numérica de la línea era en negro sobre fondo blanco, y el resto de la tira podía tener tres colores: de color rojo si eran líneas urbanas que pasaban por la Pl. Urquinaona o la Pl. Universidad o la Pl. Cataluña (el centro de la ciudad), amarillo si se trataba de una línea transversal, verde si era una línea periférica y azul si és una línea nocturna. Las líneas interurbanas eran de color amarillo de fondo con letras en negro.

En estas tiras se indicaba el número de la línea, el origen y final de la línea, el recorrido y la primera y última salida desde el origen de la línea en días laborables, sábados y festivos. Además si en la línea se podía utilizar la tarjeta multiviaje T3 o T5 aparecía tambien indicado debajo del indicativo de la línea.

Como curiosidad citaremos una extiqueta experimental que se creó para la inauguración de la línea 74, en octubre de 1983. Esta tira era más grande y contenía muchas más información que las anteriores: una descripció gráfica esquemática del recorrido de la línea con indicación de las calles por donde pasa el autobús y las paradas, una indicación de los transportes más próximos en cada parada y una indicación de los intervalos de paso desde la hora de inicio hasta la última salida.

Marquesinas En el tema de marquesinas: era el año 1955 cuando comenzarón a implantarse marquesinas en las paradas, protegiendo a los viajeros de las inclemencias del tiempo.

Las primeras marquesinas se instalaron en las plazas de Cataluña, Urquinaona y Rovira, y frente a la estación de Francia. Además se instaló una en la Av. Tibidabo con una curiosa prueba de dotarla con un sistema de calefacción por infrarrojos. Además, se estaban instalando nuevas marquesinas en el origen de la línea 64, en Pedralbes, y en la Diagonal, frente al Club de Polo, origen del autobús P.

Ocho años más tarde, en 1963 se comenzó a establecer una nuevas marquesinas que convivieron con nosotros buena parte de la década de los 60,70 y 80s. La primera de ella, e instalada como prueba piloto, se realizó en la Avenida del Generalísimo, junto a la plaza de Calvo Sotelo (actual Av. Diagonal con Pl. Francesc Macià). Eran en realidad soportes de publicidad realizadas en hormigón.

A finales del año 1963, y comprobado el éxito que tubo el primer piloto, se instalaron seis más: Una en la misma Avenida del Generalísimo, cerca de la Vía Augusta. Otra en la Plaza de la Universidad y las restantes en el Paseo de Gracia.

Cinco años más tarde, en 1968, ya existía 83 marquesinas instaladas.

Más adelante aparecen otras metálicas, pero siempre todas con los elementos publicitarios encima. Incluso se llegaron a poner teléfonos en ellas. Eran marquesinas abiertas, y no como casetas, debido al benévolo clima de la ciudad.

A principio de la década de los 70 se comenzaron a instalar nuevas marquesinas con cabinas de teléfono. El 3 de febrero de 1973 y ante las quejas de los usuarios, la Compañía requirió de la empresa concesionaria el traslado del panel correspondiente al servicio telefónico al alteral opuesto de donde procede el autobús, a fin de facilitar a los señores usuarios la visibilidad de identificación de los autobuses.

En el verano de 1985 se instaló las primeras plataformas de hormigón prefabricadas delante de las paradas de autobuses, para evitar que estacionen turismos. Son plataformas se situaba a lo largo de la acera como si fuera una prolongación, e invanden unos metros de calzada. Fue una experiencia piloto en ese verano, que afecto unas 20 paradas de autobuses, y que posteriormente se fue extendiendo y manteniendo en toda la red.

En 1987, y con la idea de cambiar todo el mobiliario de la ciudad por los próximos Juegos Olímpicos, CEMUSA reciben el encargo de cambiar todas las marquesinas de autobús de Barcelona, unas 2000 por esa época, era la primera ciudad de España con esa misión, de cambiar todas ya que hasta entonces la ciudad de Barcelona estaban llenas de marquesinas distintas.

Para ello contactan con los arquitectos Elies Torres, José Antonio Martinez Lapeña y Josep Lluís Canosas e idean unas nuevas marquesinas -en forma de mesa- de pilares de acero inoxidable de 0'2 m de diámetro con acabado matizado y techo de poliéster color amarillo. Escogieron el color amarillo, porque era el color de los taxis. Miraron de que fueron el color rojo de los autobuses, pero no acabó de gustar.

Tenían además mamparas de vidrio de seguridad como panel publicitario que además ofrecían el foco de luz. La inserción de publicidad financiaba la instalación y mantenimiento de la marquesina. El nombre de esta marquesina era Palio (Pal.li en catalán) por su forma de mesa y de llevar a alguien "bajo palio". Al final salió la marquesina más baratas del mercado y con más arraigo. Esta marquesina ganó el Premio Delta ADI-FAD 1988. Y se ha exportado a todas las ciudades del Area Metropolitana y otras ciudades de España y del Extranjero.

Al principio, en junio de 1987, se colocaron plafones publicitarios en las esquinas de la Av. Diagonal, no eran paradas, pero era un nuevo mobiliario urbano que venía pronto a establecerse en toda la ciudad y que formarian parte de las nuevas marquesinas. Estos plaflones publicitarios se le llamaron "opi".

Las primeras marquesinas de autobús se estrenaron en el carril central del Pº de Colón, en el año 1988. Las primeras marquesinas tenían el panel publicitario -que se instaló el año anterior- al inicio de la marquesinas, en distinto lado del actual, pero TMB aconsejó que se cambiaran de posición para evitar los tropiezos de los transeúntes. Más adelante se instalaron en la Diagonal y en algunas calles del Eixample.

En 1989 se completó el programa de sustitución de los postes de paradas de TMB por un nuevo modelo unificado del ámbito de actuación de la Entidad Metropolitana del Transporte (EMT), homogéneo para todas las empresas de transportes del área metropolitana. También se procedió a la sustitución de las antiguas tiras adhesivas indicadoras de líneas (horinzontales) por el nuevo modelo (vertical) de formato y color unificado amarillo y negro.

El proceso de cambio, comenzó en el año 1987, en la Av. Diagonal entre Paseo de Gracia y Francesc Macià, donde durante un tiempo convivieron los dos tipos de paradas: la de la EMT y el Vidal Hopital. Se hizo una mini-prueba para ver si los usuarios consultaban una u otra.

Durante el año 1998 se continuó con acciones de señalización de las dos redes de transporte (Metro y Bus), a fin de facilitar la orientación de los usuarios. A la red de autobuses podemos destacar la introducción del nuevo formato de la tira en que se ve el plano detallado de la línea, el nombre y la situación de las paradas y puntos de intereses. También se aprobó el nuevo diseño de los palos de las paradas, que se instalarían en 1999.

A finales de ese año 1998,se presentó el nuevo modelo de marquesina que substituiría progresivamente las líneas existentes. En el nuevo modelo, diseñado por Norman Foster, destacaba la ubicación de la información en una zona separada del banco para los ciudadanos. También se instalaban en los finales de línea integrados con un WC para los empleados de TMB.

En 1999 se renovó las banderolas de los palos de parada y se puso el nombre de las paradas en las banderolas y marquesinas. Se cambiaron las tiras de información de la línea con el recorrido bajo un plano e indicando los nombres de cada parada.

Durante los meses de febrero y mayo del año 2000, TMB renovó las parada de sus línias con la incorporación de mejoras en los elementos informativos y en su diseño, así como también de nuevos soportes con protección para las tiras informativas de las líneas.

En primer lugar, hay que destacar la instalación en los palos de unas nuevas banderolas que incluyen el nombre de la parada que corresponde al lugar donde está ubicada. La banderola añade, a más, un nuevo diseño del pictograma del bus, más moderno y visible. El elemento más novedoso de los palos son los soportes con protección de la información del servico que se puede consultar(línea, recorrido, paradas, horarios, etc.). Los soportes son unos cilindros de aluminos en los que figuran las tiras informativas de les línias, también de nuevo diseño, que ahora incorporan un sistema de proteción para evitar su deteroramiento. Por lo que respecta a los cilindros de soporte de las tiras informativas, los nuevos son más grandes y tienen una capacidad máxima de hasta 6 línias, considerada por los expertos como límite para permitir una correcta consulta.

También, durante el año 2000 se empezaron a instalar en las parada pantallas de proximidad. Estas pantallas ofrecen información diversa, como la identificación de la línea, el destino del autobús del que se informa y la previsión en minutos del tiempo de llegada, además de la posibilidad de informar sobre las incidencias que afecten al servicio de bus. En el 2001 existian estas paradas con pantallas de proximidad, pero se prevee instalarse 60 pantallas más con las mismas características en otras paradas de la ciudad que facilitarán el uso del autobús.

  • Vall d'Hebron / Residència (sentido Llobregat)
  • Major de Gràcia / Lesseps (sentido montaña)
  • Creu Coberta (sentido Llobregat)
  • Pg. Gràcia / Aragó (sentido mar)
  • Pg. Gràcia / Diagonal (sentido montaña)
  • Pl. Palau (sentido mar)
  • Pl. Tetuan / Pg. Sant Joan (sentido montaña)
  • Av. Diagonal / Entença (sentido mar)
  • Ronda Universitat / Pl. Catalunya (sentido Llobregat)
  • Ronda Sant Antoni, 70 (sentido mar)

El 20 de septiembre del 2005, se cambiaron las etiquetas de la línea 6, indicando que tendría seguimiento SMS. Sería la primera línea que tuviera este seguimiento.

En agosto del 2008, en Sant Joan Despí vimos una prueba de paradas iluminada. ¿Sería la primera de todas las que se podrian en el area de Barcelona?, el tiempo lo dirá.

En ese mismo año JC Decaux gano el concurso de marquesinas de autobuses, en detrimiento de CEMUSA, y realiza una versión mejorada de la maquesina Palio amarilla que resolvían algunos de los problemas que planteaba la primera. El cambio de ubicación de los paneles informativos, antes situados sobre el asiento, hacía más fácil su consulta. También la estabilidad del banco fue mejorada y se incorporó en el techo una pequeña portuberancia que guardaba celúlas fotovoltaicas que servián para iluminar focos de luz led del techo que se encienden a la presencia de los usuarios. El panel publicitario creció un poco más, para poder albergar pantallas que indica el tiempo para el próximo autobús

En octubre del 2009, se empezaron a instalar paradas solares. Era un sistema innovador que funciona íntegramente con energía solar. Aparte de tener las enganchinas de las líneas, tiene una pantalla que informa de la próxima llegada de los autobuses El desarrollo de estas paradas fueron desarrolladas entre la empresa catalana CAPMAR y el Instituto Europero de Diseño de Barcelona.

Con la llegada de la Nova Xarxa Bus, en 2012, los recorridos de las nuevas líneas que entraban en servicio representaron sus recorridos a modo de termómetro, indicando todas las paradas. En contraposición de las tiras que existían, desde 1999, que estaban representados en un mapa

En abril de 2021 TMB completó la implantación de etiquetas inteligentes, usando la tecnologia NaviLens creada por la empresa murciana Neosistec liderada por Javier Pita. Esta tecnología comenzó en el año 2019 en la línea de Metro L9 y que más tarde se amplió al resto de la red de Metro. Su primer uso fue para las personas con discapacidad visual, pero viendo su potencial, la Compañía la implantó en las paradas de bus y las universalizó para todos los usuarios.

En enero de 2023, aprovechando un cambio de horario de la línea 191, se adaptó su tira para usar el formato termómetro que ya se usaban las líneas de la NxB. Esta vez el termómetro era de color rojo.

Anexos:
Manual Parada Bus TMB Nova Xarxa Bus (por CriteriSign)

Fuentes: La Vanguardia, 15 septiembre 1959, página 20, 25 febrero 1960, página 15
Avui. 15/1/1988. Pàgina 16.